ü Tienes
que hacer la llamada que tienes miedo de hacer.
ü Tienes
que levantarte más temprano de lo que quieres levantarte.
ü Tienes
que dar más de lo que obtienes a cambio de inmediato.
ü Tienes
que preocuparte más por los demás de lo que ellos se preocupan por ti.
ü Tienes
que luchar cuando estás herido, sangrado y adolorido.
ü Tienes
que ir a lo inseguro cuando juegas si lo seguro parece más inteligente.
ü Tienes
que liderar cuando nadie te sigue todavía.
ü Tienes
que invertir en ti mismo a pesar de que nadie más lo haga.
ü Tienes
que lucir como un tonto mientras estás buscando las respuestas que no tienes.
ü Tienes
que trabajar en los detalles cuando es más fácil encogerse de hombros.
ü Tienes
que entregar resultados cuando ofrecer una excusa es una opción.
ü Tienes
que buscar tus propias explicaciones, incluso cuando te dicen que debes aceptar
los “hechos”.
ü Tienes
que cometer errores y quedar como un idiota.
ü Tienes
que intentar y fallar y volver a intentarlo.
ü Tienes
que correr más rápido a pesar de que te hayas quedado sin aliento.
ü Tienes
que ser amable con la gente que ha sido cruel contigo.
ü Tienes
que cumplir con los plazos de entrega irrazonables y ofrecer resultados sin
igual.
ü Tienes
que ser responsable de tus acciones, incluso cuando las cosas van mal.
ü Tienes
que seguir moviéndote hacia donde quieres estar, sin importar lo que esté
delante de ti.
ü Tienes
que hacer las cosas difíciles. Las cosas que nadie más está haciendo. Las cosas
que te asustan. Las cosas que hacen que te preguntes cuánto tiempo más podrás
aguantar.
ü Ésas
son las cosas que te definen. Ésas son las cosas que hacen la diferencia entre
vivir una vida de mediocridad o el éxito escandaloso.
ü Las
cosas difíciles son las cosas más fáciles de evitar. Para excusarte. Para
fingir que no aplican a ti.
ü La
simple verdad acerca de cómo las personas comunes logran hazañas increíbles de
éxito es que ellos hacen las cosas duras que personas más inteligentes,
calificadas, más ricas, no tienen el valor —o la desesperación— de hacer.
ü Haz
las cosas difíciles. Puede que te sorprenda lo increíble que eres en realidad.