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sábado, 23 de septiembre de 2017
miércoles, 13 de septiembre de 2017
QUÉ ES NORMAL EN PSICOLOGÍA
Definir de forma clara e inequívoca el concepto de normalidad aplicado a la vida psíquica es algo ciertamente difícil. Los límites entre normal y anormal no están definidos, y en su delimitación influyen tantos factores cuantitativos como cualitativos.
Del concepto teórico de normalidad deriva su aplicación práctica, por la que decidimos si «esta persona es normal o no», y, posteriormente, afirmamos si está sana o enferma. Muchas veces se acude a psiquiatras y psicólogos para que determinen la normalidad y la salud mental de un sujeto a la hora de seleccionarlo para un trabajo, proponerlo para un puesto de responsabilidad, enjuiciarlo por un delito que ha cometido, valorar su imputabilidad... Es entonces cuando entra en juego el concepto de normalidad. La definición de normalidad se realiza desde cuatro perspectivas distintas que se complementan entre sí:
— Normalidad como salud. Esta idea deriva del enfoque médico tradicional: «uno es normal cuando está sano»; lo «normal» es que la mayor parte de la gente no padezca enfermedades; en cuanto aparecen síntomas y signos patológicos el individuo se aparta de la normalidad. En el terreno de la psiquiatría ocurre lo mismo: una persona se considera normal mientras no presente síntomas de perturbaciones psíquicas, tipo depresiones profundas, reacciones vivenciales anómalas, etc. La forma más simplista de esta perspectiva la dio Romano (1950), que afirmó que una persona está sana cuando se encuentra razonablemente libre de dolores, molestias e incapacidades.
— Normalidad como utopía. Es lo ideal, lo óptimo, cuando todos los elementos del cuerpo, y en este caso de la mente, trabajan de forma más armoniosa y perfecta. Esto es, como su propia definición dice, una utopía. Ya Freud afirmó: «Un YO normal es, como la normalidad en general, una ficción ideal.»
— Normalidad como promedio. Esta perspectiva se basa en el principio de «la curva de campana» que maneja la estadística. Lo que todo el mundo hace, tiene o es, se considera lo normal. Este concepto de normalidad es el que se emplea en los tests: tras aplicarlos a muchas personas, se obtienen los valores promedios y alrededor de ellos se estructuran las puntuaciones normales y anormales. Hoy en día se emplea cada vez más esta orientación, así como los tests y otras pruebas de valoración objetivas.
— Normalidad como sistema de transacción. Según esta perspectiva, la conducta normal es el resultado de una serie de sistemas que interactúan. Con esto se da a entender que hay cambios temporales en la situación de una persona que entran dentro de la normalidad. La normalidad no es estática, sino que varía con el tiempo.
Vamos a ver algunos ejemplos. Uno de los más ilustrativos es el de la caries dental. Lo normal y sano es no tenerla, pero el problema es tan frecuente que se considera como normal tener alguna. Entran en juego la norma como salud y la norma como promedio.
También interviene la norma como sistema de transacción ya que al reparar la caries, desaparece, luego es algo temporal. Otro ejemplo sería la tristeza, que no la depresión. Todo individuo puede atravesar una fase de tristeza, por ejemplo, tras un grave contratiempo o la muerte de un ser querido: es una tristeza comprensible, que pasa y no llega a constituir una enfermedad.
Fuente:http://www.proyectopv.org
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jueves, 22 de septiembre de 2016
CUIDARNOS A NOSOTROS MISMOS
Cuando somos
pequeños, tenemos por lo general unos padres que (como pueden) nos dan una
serie de cuidados y nos mantienen. Llega un momento en nuestras vidas, sin
embargo, que nos corresponde a nosotros dar ese paso y buscar nuestra
manutención, es decir, emanciparnos.
Sin embargo, deseo
hacer la siguiente aclaración: así como la mayoría de la gente tiene claro que
tiene que valerse económicamente por sí misma a partir de un determinado momento,
muy diferente suele ser la cuestión en lo referente a las emociones y los
afectos. Inconscientemente, solemos repetir los patrones que hemos heredado de
nuestros progenitores y eso no siempre es bueno o adecuado ni para nosotros ni
tampoco para el momento social correspondiente.
En una sociedad
tan cambiante, sucede que a lo largo de la vida podemos tener varios empleos,
varias parejas y, sobre todo, actitudes y valores que nuestros progenitores no
entiendan fácilmente. Esto significa que tenemos que buscar en nosotros mismos,
a partir de un determinado momento, lo que es bueno para nosotros en cada uno
de los ámbitos que describo. De la misma manera, también tenemos que buscar
nuestro propio camino a la hora de gestionar emociones y ver qué hábitos
saludables pueden ser positivos para nosotros.
¿Por qué una
persona repite en sus relaciones de pareja roles familiares o busca exactamente
lo contrario? Bien, porque, de una forma u otra, esa historia familiar suya le
está determinando su vida actual, y puede que ello le funcione pero también
cabe la posibilidad de que no. ¿Por qué el hijo de un alcohólico se da a la
bebida o bien es un abstemio radical? Justamente por la misma razón. La
conclusión a la que quiero llegar, en definitiva, es que NOSOTROS TENEMOS QUE
ESCRIBIR EL GUION DE NUESTRAS PROPIAS VIDAS Y, POR LO TANTO, SER RESPONSABLES
DE GENERAR VÍNCULOS A PARTIR DE LO QUE QUEREMOS AQUÍ Y AHORA A PARTIR DE TODO
NUESTRO BAGAJE EMOCIONAL, Y NO SOLO POR NUESTRA NIÑEZ.
sábado, 3 de septiembre de 2016
DIFERENCIAS ENTRE MUJERES MADURAS Y MUJERES INMADURAS
Las mujeres maduras y las “niñas” piensan y viven de manera
diferente, ya que interactúan con el mundo desde otra perspectiva. Las primeras
se enfocan en realizar sus metas y logros, además de ser independientes,
mientras que las segundas esperan que las demás personas les resuelvan toda
clase de asuntos; se sienten vulnerables la mayor parte del tiempo y buscan
constantemente la atención que un hombre pueda brindarles.
Sobre todo porque hay ciertas
cosas que efectivamente parecen bastante ciertas y se reflejan en conductas que
muchas mujeres realizan cotidianamente con sus parejas.
Las 11 diferencias entre las
mujeres inmaduras y las mujeres maduras
Al parecer, existen más mujeres
inmaduras en el “mercado” que las que, sin importar su edad, han dejado de
pensar como niñas en lo que respecta a una relación.
Las mujeres maduras y las “niñas”
piensan y viven de manera diferente, ya que interactúan con el mundo desde otra
perspectiva. Las primeras se enfocan en realizar sus metas y logros, además de
ser independientes, mientras que las segundas esperan que las demás personas
les resuelvan toda clase de asuntos; se sienten vulnerables la mayor parte del
tiempo y buscan constantemente la atención que un hombre pueda brindarles.
Sobre todo porque hay ciertas
cosas que efectivamente parecen bastante ciertas y se reflejan en conductas que
muchas mujeres realizan cotidianamente con sus parejas.
No sé si tenga que ver
directamente con madurez, pero sí con una mujer segura de sí misma y una que
efectivamente depende bastante de su pareja para conformar su identidad
personal.
#1 CONTROL
Las mujeres inmaduras quieren
controlar al hombre en sus vidas.
Las mujeres maduras, saben que si
el hombre es realmente suyo, no hay necesidad de control.
#2 VOCABULARIO
Las mujeres inmaduras te gritan
porque no las llamas.
Las mujeres maduras están
demasiado ocupadas y sólo se limitan a decirles con poemas y mensajes dulces
que la recuerdes.
#3 TIEMPO
Las mujeres inmaduras monopolizan
el tiempo de su hombre. Las mujeres maduras se dan cuenta de que un poco de
espacio, hace del tiempo juntos algo mas especial.
#4 PERDÓN
Las mujeres inmaduras no perdonan
y se castigan y castigan por el rencor
En cambio, las mujeres maduras
perdonan, ofrecen su hombro y un pañuelo.
#5 MIEDO
Las mujeres inmaduras tienen
miedo de estar solas.
Las mujeres maduras lo utilizan
como tiempo para su crecimiento personal.
#6 DIFERENCIAR
Las mujeres inmaduras ignoran a
los buenos hombres.
Las mujeres maduras ignoran a los
malos.
#7 VENGANZA
Las mujeres inmaduras lastimadas
por un hombre, hacen que todos los hombres paguen por eso.
Las mujeres maduras saben que fue
sólo un hombre y nada mas.
#8 EN EL AMOR
Las mujeres inmaduras se enamoran
y persiguen sin descanso.
Las mujeres maduras saben que
algunas veces el que tu amas, te amará y si no, continúan su camino sin rencor.
#9 HOGAR
Las mujeres inmaduras te hacen
que vuelvas a casa.
Las mujeres maduras hacen que
quieras siempre volver a casa.
#10 PLANES
Las mujeres inmaduras dejan su
agenda abierta y esperan a que su hombre hable para hacer planes.
Las mujeres maduras hacen sus
planes y cariñosa mente notifican a los hombres para que ellos se integren como
mejor les convenga.
#11 INTELIGENCIA
Las mujeres inmaduras leerán esto
y harán una mueca.
Las mujeres maduras lo compartirán
miércoles, 17 de agosto de 2016
GENTE TOXICA
¿QUÉ CARACTERIZA A LA GENTE TÓXICA?
No soy muy partidario como psicólogo de etiquetar a las personas,
y menos cuando estas etiquetas son negativas. De hecho, parece que el concepto
de “persona tóxica” ha aparecido en cierto tipo de literatura como una forma de
catalogar la personalidad de ciertos individuos, y raramente se explica que el
carácter y los hábitos se pueden cambiar.
Por tanto, una persona puede causar malestar a sus
allegados bajo ciertas circunstancias, peronunca
hay que caer en el error de pensar que las personas tóxicas no pueden cambiar.
Todos podemos cambiar, absolutamente todos. Incluso puede que alguien te
considere una persona tóxica, así que hay que relativizar esta etiqueta y darle
un sentido nuevo, que nos ayude a escapar de situaciones que nos hacen sufrir,
pero no como una forma de despreciar o estigmatizar a alguien.
PERSONALIDAD TÓXICA: EN OCASIONES MERECE LA PENA ALEJARSE
¿Quién no ha tenido un jefe cínico, un compañero de
trabajo detestable o un cuñado que no para de decirnos lo que tenemos que
hacer? Lidiar con personas tóxicas puede ser inevitable en determinados
contextos. Pero lo que sí podemos controlar es la forma en que
hacemos frente a sus comportamientos.
Si no actuamos con las debidas precauciones, las
personas negativas pueden llegar a influirnos y hacernos sentir mal.
Además, es posible que acumulemos tensión y estrés por tener que convivir con
ellas. Motivos más que suficientes para intentar deshacernos de esta carga
psicológica.
Aquí te propongo nueve señales que deben
alertarte de que una persona tóxica te está consumiendo. Ha llegado el momento
de poner negro sobre blanco, porque nadie tiene el derecho de hacerte sentir mal.
1. HABLAS MUCHO SOBRE LA PERSONA TÓXICA
Si notas que estás continuamente quejándote a tus
compañeros de trabajo sobre lo manipulador que es tu jefe de oficina o
lamentándote ante tu pareja de lo mal que te hace sentir tu suegra en las
reuniones familiares, debes saber que esta actitud va a agotarte mentalmente, y por supuesto no va a
ayudar a mejorar la situación.
Conversar acerca de la persona tóxica una y otra
vez solo consigue mermar tu autoestima y darle más importancia de la que
realmente tiene. No vas a solucionar nada dándole vueltas, y quizá empieces a
resultar molesto para quien debe escuchar tus constantes lamentos.
2. TE HACE PERDER LOS PAPELES
Si tu día a día está siendo afectado por un experto
manipulador o por personas que te critican a tus espaldas, debes saber que los individuos tóxicos pueden
afectar a tu equilibrio emocional. Debes tener cuidado, porque
es fácil que lleguen a causarte frustración e incluso ira.
Si esto sucede, es el momento de tomar medidas y solucionar el problema.
3. TU AUTOESTIMA SE RESIENTE
La gente tóxica suele ser grosera, maleducada y
pueden resultar muy ofensivos y molestos. En ocasiones, su trato degradante
hacia ti puede hacer sentir mal, pero recuerda que tu valor como persona nunca debe estar
supeditado a las opiniones (y
mucho menos a los insultos y vejaciones) de alguien que no seas tú mismo.
4. LES ECHAS LA CULPA DE TU COMPORTAMIENTO O ACTITUD
Si una persona tóxica logra hacerte pasar por su
aro y manipularte, puede ocurrir que culpes constantemente a esa persona de
las decisiones que tomes y de todo lo malo que te suceda. Si
crees que la persona tóxica tiene la culpa de todo, reconsidera la situación.
Tal vez solo le culpas para rehuir tu responsabilidad. Es tu vida, y si
hay alguien que tiene tanto poder sobre ti, lo mejor es que intentes alejarte y
que empieces a aceptar la responsabilidad que tienes sobre tu propio destino.
5. TEMES TENER A LA PERSONA TÓXICA CERCA
Si te horroriza pensar que debes pasar un rato con
esa persona, no hay duda alguna que, por lo menos para ti, ese individuo es tóxico y tiene
la habilidad de crearte un fuerte malestar. Si con solo
anticipar que vas a tener que encontrarte con ese compañero tóxico en una
reunión ya empiezas a tener sensaciones negativas, es una señal inequívoca de
que algo tiene que cambiar en tu vida.
6. TE REBAJAS A SU NIVEL
Cuando alguien te saca de tus casillas de forma
constante, puede que sientas la tentación de entrar al trapo y
comenzar a confrontarle. Esto hará que empieces a tener
actitudes y conductas reactivas que, probablemente, no están en consonancia con
tus valores personales. Caer en el juego de la persona tóxica puede ser
inevitable si nos lleva a un extremo, pero no es el modo de resolver la
situación. De hecho, es probable que solo logres empeorar las cosas
y desesperarte más.
7. TE IMPIDE ESTAR RELAJADO Y CÓMODO
Cuando nos vemos asediados por personas que nos
manipulan o usan estrategias retorcidas para desmotivarnos, puede que llegue un
punto en que nos sintamos en un estado de constante tensión y preocupación. Y cuando estamos intranquilos, es
más fácil que las cosas nos salgan mal. Si no consigues tener
la cabeza fría y relativizar la situación, la persona tóxica irá comiéndote el
terreno. Por eso es importante que logres distanciarte emocionalmente de la
fuente de toxicidad.
8. REACCIONAS CON MECANISMOS DE AFRONTAMIENTO DISFUNCIONALES
Cuando vivimos en un permanente estado de tensión,
podemos reaccionar de forma negativa. Por ejemplo, para mitigar el desasosiego
que sentimos, podemos permitirnos algunos “caprichos” nada saludables, como
tomar una copa de alcohol de vez en cuando o comer más de la cuenta. Es una forma
insana de atajar la sensación de ansiedad, y te lleva a un círculo vicioso del que va a ser muy
complicado salir.
9. A TU PAREJA TAMBIÉN LE AFECTA EMOCIONALMENTE
Puede que la persona tóxica sea algo así como una
figura de autoridad (un jefe, un profesor, tu padre o madre…) que no
puedes cuestionar. Si se da el caso de que te humilla y tu nivel de desgaste
emocional aumenta, puedes cometer el error de trasladar tu foco de malestar
hacia nuestra pareja, hijos o familiares. El mal humor se contagia, y si dejas que la persona
tóxica te contamine es posible que te conviertas en una persona tóxica para
nuestro tu más cercano y hagas sufrir a personas que no tienen la culpa.
GESTIONA LA PRESENCIA DE LAS PERSONAS TÓXICAS EN TU VIDA
Si las personas tóxicas están sacando la peor
versión de ti, va a ser necesario que te plantees algún tipo de cambio en
tu vida.
Esto puede pasar por un simple cambio de
mentalidad: no entrar al trapo de sus juegos manipuladores o ignorar su
presencia, por ejemplo. En otros casos, la mejor decisión puede ser alejarte de
este foco de negatividad y de mal humor antes de que te acabe afectando
seriamente.
sábado, 16 de julio de 2016
viernes, 17 de junio de 2016
CÓMO TE VEN LOS DEMÁS EN REALIDAD
Ojalá fuera posible entrar en la mente de los demás para verse a uno mismo con sus ojos. ¿Ese atuendo te hace lucir más esbelto? ¿Y tu manera de caminar no es demasiado tosca? A veces no podemos evitar que estas preguntas surjan en nuestra cabeza, por ello Francis Galton llevó a cabo un experimento relacionado con el tema. Y sus resultados lo sorprendieron incluso a él.
CONCLUSIONES.
Un día
sir Francis Galton decidió realizar un experimento peculiar. Antes
de salir a caminar por las calles de Londres, tal y cómo
lo hacía todos los días, se sugestionó: «¡Soy una persona detestable
odiada por toda Inglaterra!». Durante unos minutos
se concentró en esa afirmación y luego, como de costumbre,
salió a caminar. Aunque esa caminata no resultó como
«de costumbre».
A cada
paso Francis veía las miradas odiosas y despectivas. Mucha gente
le daba la espalda y en algunas ocasiones incluso escuchó
groserías dirigidas a él. Uno de los obreros del puerto, cuando
Galton pasaba por ahí, le dio un codazo tan fuerte que se cayó.
Parecía
que incluso los animales tenían una actitud hostil hacia él. Cuando pasó
por un carruaje, el caballo golpeó al psicólogo
en la cadera de tal forma que nuevamente se cayó
al suelo. Galton intentó provocar compasión entre los testigos pero, para
su asombro, escuchó que las personas empezaron a defender
al animal. Galton se apresuró a regresar a la casa sin
esperar a que su experimento mental lo llevara a consecuencias
más graves.
Esta
historia se describe en muchos libros de psicología. Sin
embargo, no se trata de la mágica materialización del
pensamiento. Al asimilar la afirmación propuesta, Galton empezó
a portarse de acuerdo a ella: cambiaron sus modales, expresiones
faciales, aspecto. De esta forma le mandó la señal al mundo
acerca del tipo de trato que se merecía.
Hay
dos conclusiones importantes que resultan de esta historia:
EL SER
HUMANO ES LO QUE PIENSA DE SÍ MISMO. ¡CAMBIA
TU FORMA DE PENSAR Y CAMBIARÁS TÚ, Y LA ACTITUD
DE LOS DEMÁS HACIA TI!
NO HAY
NECESIDAD DE COMENTARLES A LOS DEMÁS NADA ACERCA
DE TU AUTOESTIMA Y TU ESTADO INTERIOR. LO SENTIRÁN.
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