Usted
no pondrá en duda que el tiempo psicológico es una enfermedad mental si observa
sus manifestaciones colectivas. Ocurren, por ejemplo, en forma de ideologías
tales como el comunismo, el nacional socialismo o cualquier otro nacionalismo,
o sistemas rígidos de creencias religiosas, que operan bajo la asunción
implícita de que el mayor bien está en el futuro y de que por tanto el fin justifica
los medios. EL FIN ES UNA IDEA, UN PUNTO EN EL FUTURO
PROYECTADO POR LA MENTE, EN EL QUE LA SALVACIÓN EN CUALQUIERA DE SUS FORMAS
-FELICIDAD, LOGRO, IGUALDAD, LIBERACIÓN, ETCÉTERA- SE ALCANZARÁ. Frecuentemente los medios para llegar a ello son la
esclavitud, la tortura y el asesinato de personas en el presente.
Por
ejemplo, se estima que para promover la causa del comunismo se asesinaron unos
cincuenta millones de personas, para lograr un "mundo mejor" en
Rusia, China y otros países (Z. Brzezinski, The Grand Failure, Charles
Scribner's Sons, Nueva York 1989, pp 239-240) . Ese es un ejemplo estremecedor
de cómo creer en un cielo futuro produce un infierno presente. ¿Puede haber
alguna duda de que el tiempo psicológico es una enfermedad mental grave y
peligrosa?
¿Cómo
opera este patrón mental en su vida? ¿Está usted tratando siempre de llegar a
un sitio diferente de donde está? ¿La mayor parte de lo que hace es sólo un
medio para lograr un fin? ¿La realización está siempre a la vuelta de la
esquina o reducida a placeres esporádicos como el sexo, la comida, la bebida,
las drogas o las diversiones excitantes o emocionantes? ¿Está siempre
concentrado en alcanzar o perseguir algún placer o emoción nuevos? ¿Cree que si
compra más cosas se sentirá más realizado, más satisfecho o completo
psicológicamente? ¿Espera a un hombre o una mujer que le dé sentido a su vida? En el estado normal de conciencia, identificado con
la mente o no iluminado, el poder y el potencial creativo infinito que se
encuentra encerrado en el Ahora están completamente oscurecidos por el tiempo
psicológico. Su vida entonces disminuye su vibración, su frescura, su sentido
de maravilla. Los viejos patrones de pensamiento, emoción, conducta, reacción y
deseo se repiten en actuaciones interminables, son un guión en su mente que le
da identidad parcial, pero que distorsiona u oculta la realidad del Ahora. La
mente entonces crea una obsesión con el futuro como escape de un presente
insatisfactorio.
Del libro:
El Poder del Ahora
Eckhart Tolle
El Poder del Ahora
Eckhart Tolle